El Ministerio de Justicia y Paz ve con agrado que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) valorara los esfuerzos de esta cartera por reducir el hacinamiento en las cárceles.
Así consta en un informe preliminar emitido este viernes por la CIDH, a raíz de la última visita que realizaron a varias cárceles del país, del 15 al 18 de febrero, los representantes de la Relatoría para personas privadas de libertad de la CIDH.
En esa ocasión, se reunieron con las autoridades del Estado, las cuales trasmitieron la preocupación que ha supuesto para el Ministerio de Justicia y Paz los niveles de sobrepoblación alcanzados por el país, fruto de la política criminal, de los últimos 25 años, lo que ha favorecido la prisionalización de los infractores de la ley penal.
También hubo oportunidad de explicar algunas de las medidas de emergencia que ha tomado el Ministerio de Justicia y Paz, como la circular 5-2015, emitida en septiembre del año pasado. Con esta directriz, se logró disminuir la sobrepoblación de un 52% a un 44%, luego de la reubicación de 888 personas, entre septiembre y diciembre, y de 109 entre enero y febrero.
Al respecto, en el informe de la comisión, se indicó lo siguiente: “…la CIDH valora los esfuerzos realizados por el Ministerio de Justicia en la adopción de medidas para reducir el hacinamiento penitenciario, tales como la reubicación de personas privadas de la libertad del régimen institucional al programa semiinstitucional o semiabierto.
”Según información oficial, de 2010 a 2014 un total de 9,422 personas privadas de libertad fueron trasladadas a un régimen semiabierto. Respecto a los resultados de la implementación de esta medida, dados a conocer por el Ministerio de Justicia a inicios de este año, la CIDH saluda que durante el periodo en referencia (2010-2014), únicamente el 2.1% del total de personas beneficiadas con este tipo de programa habrían ingresado a un centro penitenciario por la comisión de una conducta ilícita…”.
Esta cartera, luego de las críticas que algunos sectores han formulado contra las decisiones de emergencia de cara a la situación penitenciaria del país, estima fundamental el apoyo que ha dado la CIDH.
Costa Rica no puede renunciar a la protección de los derechos humanos de ningún grupo vulnerable y el reconocimiento que hace la comisión es una señal de que se ha hecho lo correcto.
Por otro lado, el Ministerio de Justicia y Paz reitera ese compromiso y el firme propósito de que, en la defensa de la dignidad de las personas privadas de libertad, sean los valores convencionales del Sistema Interamericano de Derechos Humanos los que inspiren la toma de decisiones de una sociedad democrática como la nuestra.