Tras el cumplimiento de sus procedimientos legales internos, Costa Rica ha depositado el instrumento de ratificación de la Convención para Combatir el Cohecho de Servidores Públicos Extranjeros en Transacciones Comerciales Internacionales (Convención Anticohecho). El depósito del instrumento de ratificación se hace ante la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que funge como Secretaría Técnica de dicha Convención. De esta forma, el 21 de julio 2017, Costa Rica se convertirá en el miembro 43 de dicha Convención.
La ministra de Justicia y Paz, Cecilia Sánchez, mostró su satisfacción por el hito que representa para Costa Rica, incorporarse a esta Convención. “La comunidad internacional en general y Costa Rica en particular, han sido testigos de diversos casos donde, las regulaciones que permite implementar esta Convención, hubieran hecho diferencias significativas para perseguir actos de corrupción perpetrados internacionalmente. Esta Convención aporta instrumentos nuevos y frescos a nuestro Gobierno y a nuestra sociedad, para protegernos ante esos hechos. Es por ello que hemos trabajado en equipo en el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo, para lograr su aprobación y mejorar así nuestras posibilidades para seguir luchando contra los actos de corrupción”.
Para el ministro de Comercio Exterior y Coordinador del Proceso de Adhesión a la OCDE, Alexander Mora, el depósito de la Convención confirma la voluntad y entereza con que Costa Rica ha asumido su compromiso tanto con la OCDE, como con la ética y la lucha contra los ilícitos internacionales. “Costa Rica ha dado un importante paso en su proceso de adhesión a la OCDE al depositar el instrumento de ratificación. Además de cumplir con la hoja de ruta del proceso de adhesión a la organización, este acto es fundamental para propósitos de mejorar las condiciones y regulaciones del país, y su capacidad para luchar contra la corrupción” comentó el Ministro. “Este es el resultado del esfuerzo de distintas instituciones que se han comprometido en la lucha contra la corrupción y el cohecho, con el liderazgo de la ministra de Justicia y Paz y del ministro Alfaro y su viceministro Mora, así como el apoyo del resto de instituciones y la Asamblea Legislativa” concluyó el ministro.
La Convención para Combatir el Cohecho de Servidores Públicos Extranjeros en Transacciones Comerciales Internacionales de la Organización para Cooperación y el Desarrollo Económico fue suscrita en 1997 y entró en vigor en 1999. Hasta el día de hoy, todos los países miembros de la OCDE y 6 países no miembros - Argentina, Brasil, Bulgaria, Colombia, Rusia y Sudáfrica - han adoptado dicho instrumento. En Costa Rica, la Convención Anticohecho fue aprobada mediante la Ley 9450 del 11 de mayo de 2017.
La Convención es el primer y único instrumento internacional anticorrupción que se enfoca en el lado “oferente” de la corrupción, es decir, la persona o entidad que ofrece, promete u otorga una dádiva. Mediante este instrumento internacional, el país se compromete a establecer normas estrictas y efectivas para tipificar, prevenir, detectar, investigar y sancionar el cohecho de funcionarios públicos extranjeros en transacciones comerciales, con la finalidad de adecuar el ordenamiento jurídico costarricense a los estándares internacionales de prevención, investigación y sanción efectiva de este delito.
El Grupo de Trabajo sobre Cohecho, establecido en 1994, es el responsable de la supervisión de la implementación y el cumplimiento de la Convención Anticohecho y los instrumentos conexos. Asimismo, está integrado por representantes de los Estados Partes en la Convención, se reúne cuatro veces al año y publica todos sus informes de seguimiento país en línea.
Costa Rica inició su proceso de ingreso a la OCDE en el 2015. En el marco de estas gestiones el país está siendo evaluado por 22 comités técnicos de la Organización, incluyendo el Grupo de Trabajo sobre Cohecho. Cada comité deberá emitir una opinión y recomendaciones respecto del nivel de las políticas y prácticas de Costa Rica en relación con los estándares de la OCDE.