A pesar de que tienen mucha agilidad los toreros improvisados salieron corneados de su visita a La Reforma.
El grupo de valientes que se mete al redondel de Zapote fue el jueves a la cárcel, en San Rafael de Alajuela, para mejenguear con la selección de reos y visitar al famoso “Guasón”, exintegrante de Los Superamigos y quien está guardado desde hace dos años y medio.
El resultado del partidito fue un “ajustadísimo”10 a 2 a favor de los locales, quienes al igual que el toro más bravo, no tuvieron piedad de los coloridos visitantes.
Uno de los que más llamó la atención, y no precisamente por sus pepinos, fue el conocido torero “Shakira”quien se echó todo el encuentro a pata pelada, al mejor estilo de jugadorazos brasileños como Rivaldo o Ronaldinho. Claro, tampoco “Shakira” la vio con el buen juego que tienen los reos.
El popular improvisado contó que está acostumbrado a jugar descalzo porque cuando estaba pequeñillo no había harina para comprar tacos o tenis de mejenguear. Los partidos eran a pata pelada.
Al final del partido la cosa fue un puro vacilón porque los improvisados regalaron las camisas que llevaban, tanto las de La Teja como las del uniforme oficial. O sea, salieron casi chingos y bailados.
Muy contento. Aunque no pudo jugar por tener una costilla quebrada, Manrique Quirós, más conocido como “Guasón”, agradeció el gesto de los compas de la plaza de toros. Eso sí, no paró de vacilarlos por la señora goleada que les metieron tras las rejas.
“Gracias a Dios todavía tengo amistades en los improvisados y durante el tiempo que he estado preso he visto la clase de personas que son. Cuando uno más los necesita no se olvidan mí”, comentó.
El eximprovisado contó que cuando llega esta época se llena de nostalgia al recordar todas las aventuras que vivió con los compañeros del redondel, por eso quedó más que feliz con la visita que le hicieron.
“Este es mi tercer año sin poder ir. Desde noviembre ya siento la necesidad de estar en Zapote. Me hace demasiada falta estar en los toros porque es algo que me da demasiada alegría”, agregó Quirós, quien llevaba más de 20 años de asistir cada fin de año al redondel.
Además de matar el tiempo mejengueando, “Guasón” también se dedicaba a cantar, pero tuvo que dejarlo cuando lo trasladaron desde la cárcel de Liberia a LaReforma hace unos meses.
“Por el momento no hay grupo. Se intentó hacer uno, pero todavía no se ha dado la oportunidad porque no hay músicos.
“Es una de las cosas que más me gusta y, por ahora, está en veremos, sí me gustaría ya que es una actividad que me ayuda a mantener la mente ocupada”, agregó Quirós, quien perteneció al grupo musical Calle Real, que se había formado en el centro penitenciario liberiano.
Fuente: La Teja